12 marzo, 2008

07 - ¿Cómo afrontar la duda familiar?

Creo que a todo escritor le llega el instante de vida en el que quienes caminan a su alrededor le preguntan:
¿Eres escritor o vago?
O le dicen:
Ser escritor tiene que estar bien: todo el día sentado, escribiendo, y sin tener que hacer tareas de esfuerzo. Mas que escritor, yo diría que eres un vago muy listo.

Ese tipo de comentarios destruyen poco a poco la mente. Después de escuchar algo así, uno se pone a pensar y a replantearse si lo que esta haciendo es el rumbo correcto para el futuro, o si valdrá de algo escribir. A mi personalmente no me ha llegado esa situación (no del todo).

Unos meses después de expresar a mis familiares, las fuerzas que me da la escritura y las ganas que tenia de seguir haciéndolo, pensé que me apoyarían, al menos, de un modo sencillo. Eso pareció suceder al principio, pero meses después descubrí que no era así del todo.
Al escuchar un poco de uno y de otro descubrí que veían bien que escribiera pero que debía dar prioridad a otras cosas antes que a la escritura. Lo veían como una especie de pasatiempo o entretenimiento, creo yo.

En fin, yo les dije:
Dejadme terminar mi libro, y ver que ocurre al presentarlo al mundo editorial. Si no consigo alcanzar mi meta como escritor, volveré a hacer todo aquello que se supone, debo hacer.
Ellos aceptaron de manera no muy clara, pero al menos podía escribir con tranquilidad en mi mente.
En mi interior creo que si me hubieran negado seguir escribiendo, lo hubiera hecho igualmente.
Es la primera vez en mi vida que tengo un sueño; un sueño que puede tener final feliz.

06 marzo, 2008

06 - Días sin inspiración

Los momentos en los que se producen las explosiones de ideas son increíblemente agradables, pero en mi opinión, las ocasiones en las que la inspiración apenas se percibe, son todo lo contrario. Se siente una terrible punzada de decepción.

Tengo una libreta llena de ideas, pero cuando me pongo a escribir hay veces que escribo muchas páginas en poco tiempo y otras veces en las que no sé cómo enlazar unas ideas con otras.
Eso me impide proseguir con fluidez.

Por suerte o milagro, siempre hay algún sueño que me muestra la luz al final del túnel. Debe ser cierto, y sin duda lo será, que durante el sueño nuestro cerebro trabaja en buscar una solución a los diversos problemas hallados durante el día.

Pero algo esencial es saber que para todo escritor es necesario tener papel y lápiz. Se deben apuntar todo tipo de ideas. Y decir que no es necesario apuntar porque se cree tener buena memoria no resulta útil. Y lo digo por experiencia propia. Decenas de veces he tenido ideas que han desaparecido por no apuntarlas y por creerme lo suficientemente dotado de memoria.

En todos los mensajes hablo de escribir, escribir y escribir. Pero no todo es eso, un escritor necesita despejar sus ideas caminado al aire libre, disfrutar de los distintos tipos de ocio y comunicarse e intercambiar ideas con todo tipos de personas.

Y recordad que yo, aún solo soy un escritor novel que no se nada más que lo que escribo. No debéis tomároslo todo al pie de la letra. Escoged las ideas que os gusten y usadlas. Las que no, dejadlas ahí para otros.